¿POR QUÉ PROBIÓTICOS?
Las bacterias buenas sirven como defensa natural contra el daño ambiental y la inflamación comúnmente asociados con picazón, sequedad, infección y olor. Cuando se aplican a la piel, los probióticos apoyan las bacterias buenas que calman naturalmente la inflamación y evitan que las bacterias malas se apoderen de ella.